¿Qué ventajas nos ofrecen los árboles contra el cambio climático? A medida que el cambio climático se ha hecho hueco en nuestras conversaciones, también han florecido numerosas acciones para paliarlo. Una de las más populares de los últimos años, gracias a su sencillez, su coste y sus beneficios, ha sido la de plantación árboles: debido al proceso de fotosíntesis, estos son capaces de absorber el dióxido de carbono de la atmósfera y expulsarlo como oxígeno, haciendo más limpio el aire que respiramos, regulando las temperaturas y reduciendo, en consecuencia, el resultado de los gases de efecto invernadero.
Según un estudio publicado en la prestigiosa revista Science, todavía queda mucho espacio para hacer crecer nuevos árboles. Solo durante el año pasado, la deforestación, motivada por la actividad humana, arrasó con 43 millones de hectáreas de bosques en todo el mundo, provocando importantes impactos en los ecosistemas, los suelos y las poblaciones que habitan sus alrededores.
Como respuesta, las plantaciones masivas de árboles se han convertido en la piedra angular de numerosas campañas medioambientales: más árboles, más oxígeno. Pero ¿realmente esta técnica tan simple es suficiente para contrarrestar el cambio climático?