Última hora ambiental

Carlos de Hita, el micrófono de la naturaleza

Carlos de Hita

Con más de 30 años de experiencia, Carlos de Hita es el sonidista oficial de la naturaleza: durante las distintas estaciones del año recoge los sonidos de cientos de especies para demostrar todo lo que suele pasar desapercibido y analizar, a través de este ruido único, cómo la actividad humana está afectando a la biodiversidad.

Durante 96 días, todo el país contempló conmocionado las impresionantes imágenes que nos llegaban de la erupción del volcán “Cumbre Vieja” en la isla de La Palma. Carlos de Hita estuvo allí recogiendo registros sonoros de toda la actividad volcánica.

Como él mismo cuenta en su blog: «Llegué a La Palma de noche y lo primero que vi fue un cielo rojo, encendido con luces que venían de las tinieblas del centro de la tierra. En los siguientes días me alejé todo lo que pude de las zonas concurridas para acercarme desde el silencio al sonido del volcán, con micrófonos ultradireccionales y potentes teleobjetivos, para registrar los profundos suspiros, la respiración de un gigante incapaz de modular su voz. Ni siquiera un temporal en el mar, una tormenta en la alta montaña, transmite esa sensación de fuerza infinita».

Escuchar la naturaleza es cuestión de tener paciencia y suerte

No hay paisaje en España donde este técnico de sonido, cuya pasión por «ver de oídas» los entornos naturales comenzó con la grabación de una berrea, no se haya parado con su micrófono amplificador a fin de guardar para siempre ese preciso instante. Una corriente de viento, un arroyo… y, de repente, ese animal que lleva tanto tiempo esperando. Luego otro y otro. Pararse a escuchar la naturaleza es cuestión de tener paciencia y suerte. «Las grabaciones son recuerdos de momentos vividos en primera línea de la naturaleza», explicaba recientemente en una entrevista. Momentos buenos y malos: «En un incendio forestal, lo que suena es el miedo. El ruido de un bosque ardiendo es la negación de todo lo que apreciamos».

Cuando el entorno natural se altera los sonidos también cambian

Su infinito currículo convierte a Carlos de Hita en una referencia nacional de la biodiversidad sonora de España: participa en programas de radio, graba para documentales y escribe en blogs donde pone al alcance del público todas las canciones que la naturaleza tiene que cantar. Esto le ha merecido el Premio Fundación BBVA en la categoría de Difusión de Conocimiento. En 2006 estuvo nominado a un premio Emmy gracias a sus colaboraciones con National Geographic. Su trabajo ha puesto banda sonora a películas, documentales, apps, guías, salas de museos, galerías de arte, centros de interpretación y hasta iglesias.

La fonoteca de este veterano sonidista también sirve para una tarea mucho más compleja: analizar la evolución de la crisis ambiental. Cuando el entorno se altera, algunos ruidos cambian su localización por migraciones forzadas, mientras que otros desaparecen para siempre. Estos cambios –casi imperceptibles al oído de cualquier inexperto– hablan a viva voz de lo que está ocurriendo. «Durante las últimas décadas han desaparecido demasiadas voces», lamenta De Hita.

Concienciar sobre la riqueza sonora de la naturaleza resulta fundamental para aprender a respetarla

No obstante, a ojos de Carlos de Hita, concienciar sobre la riqueza sonora de la naturaleza resulta fundamental para aprender a respetarla. Por ello, el experto ha publicado recientemente El sonido de la Naturaleza. Calendario sonoro de los paisajes de España, un libro que, a través de 70 códigos QR, permite disfrutar de esta banda sonora de ecosistemas mientras se está leyendo. Un libro que puede utilizarse en el aula para invitar a pararse, a disfrutar de ese espectáculo único alimentado por los sonidos de los animales, esenciales para comprender la delicadeza de algo tan vivo como la propia naturaleza.

Texto: Cristina Suárez