UHA. A finales de 2019, la Comisión Europea anunciaba el Green Deal, ese ambicioso acuerdo que sienta las bases de la transición ecológica. Poco antes, el Parlamento Europeo declaraba la situación de emergencia climática en el continente. ¿Qué han supuesto y que supondrán estas decisiones para Europa?

MAM. La presidenta de la Comisión Ursula von der Leyen dijo una vez que no podemos pedirle al que no llega a fin de mes que se preocupe por el fin del mundo. La crisis financiera de los últimos años –y últimamente la pandemia de la covid– acapara todos los titulares de los periódicos… y, sin embargo, los científicos del mundo entero advierten de que el cambio climático será el mayor reto al que tengamos que enfrentarnos en este siglo XXI. Por eso, la UE propone este ambicioso paquete de medidas conocido como Green Deal, que tiene dos principales objetivos: por un lado, modificar nuestra sociedad en todos sus ámbitos, ya sea en la economía, la producción o el consumo, para virar hacia un modelo sostenible y respetuoso con el medioambiente. Una transformación de nuestro mundo que también hemos de ver como una oportunidad, porque generará nuevos empleos además de revertir el calentamiento global. Pero es que, además, la Unión Europea se ha propuesto liderar esta transformación a nivel mundial y, con su ejemplo, fomentar que otras potencias del mundo se sumen a nuestra iniciativa. Porque de nada servirán nuestros esfuerzos si actores como Estados Unidos o China continúan con los actuales modelos de producción.

UHA. El coronavirus ha copado la agenda política del último año, pero la emergencia climática sigue ahí. Desde el Parlamente Europeo ¿qué iniciativas se han propuesto para acelerar la transición ecológica en el continente?

MAM. La lucha por el clima es una carrera de fondo en la que, por desgracia, cada vez tenemos menos tiempo para actuar. Sin embargo, no es sencillo y no todas las medidas se pueden aplicar de manera inmediata. Esto va a suponer una transformación enorme de nuestras sociedades. Y, por supuesto, no todos los países llegan en las mismas condiciones.

Una de las metas por excelencia para lograr que la transición ecológica sea un éxito es alcanzar la neutralidad climática, es decir, reducir nuestras emisiones de CO₂ a niveles similares a los que nuestro planeta puede absorber. Se trata de una estrategia para la que la UE ha fijado una fecha límite –2050– marcando además el objetivo intermedio de alcanzar un 55% de reducciones de CO₂ en 2030. La verdad es que no tenemos tiempo que perder, por eso el Parlamento Europeo lucha por elevar esa cifra intermedia al 60%. Se trata sin duda de un objetivo ambicioso y, a la vez, complicado: hay economías de Estados miembro como Polonia que hoy continúan siendo muy dependientes del carbón. Pero hay otras medidas, igualmente importantes, que pasarán a ser una realidad en muy poco tiempo: es el caso de los plásticos de un solo uso, que desaparecerán de nuestras vidas para dar paso a soluciones más sostenibles este mismo año.

UHA. El pasado diciembre se presentaba el Pacto Europeo por el Clima, una apuesta por acercar a la ciudadanía a la lucha climática. ¿En qué consiste este pacto y qué papel jugará el Parlamento Europeo en su implementación?

MAM. El Pacto Europeo por el Clima es una propuesta de la Comisión para generar un debate en Europa, a todos los niveles, sobre la urgente acción por el clima y el medioambiente. Es una forma de dar voz y espacio a todos en el diseño de nuevas acciones por el clima… Y cuando decimos todos nos referimos no solo a las autoridades locales, regionales y nacionales, sino también a las empresas, los sindicatos, la sociedad civil, los expertos, los propios colegios y, por supuesto, los ciudadanos. Y en todo esto, el Parlamento Europeo mantendrá la que es una de sus principales misiones: velar porque ese diálogo incluya verdaderamente a todos y nos permita, mediante la cooperación y la transparencia, alcanzar nuestros objetivos de neutralidad climática. En definitiva, que logremos llegar a cero emisiones de carbono en 2050.

UHA. Este Pacto Europeo por el Clima busca empoderar a las personas. Así que ¿cómo pueden los maestros empoderar a sus alumnos?

MAM. Hablando del tema, concienciándoles de que el cambio climático es una realidad, y que la necesaria solución y cambio de hábitos para alcanzarla también depende de ellos. La salud del planeta se recuperará con leyes, pero también necesita pequeños gestos. De todos modos, diría que las nuevas generaciones son a menudo las más activistas y comprometidas con la lucha contra la emergencia climática. Miro a mis hijas de 12 años y me doy cuenta de que los chavales de hoy ya son conscientes de lo que nos jugamos: nuestro futuro y el de todo el planeta.

UHA. A pesar de la pandemia, miles de jóvenes en todo el mundo siguen movilizándose –de forma digital– para luchar contra el cambio climático. Muchos de ellos, votarán en las próximas elecciones europeas. ¿Cómo pueden ellos redibujar la Unión?

MAM. Será precisamente la generación más joven hoy la que viva todavía para ver las consecuencias de esta batalla en 2050. Creo, además, que los nativos digitales son una generación empoderada en el activismo, se dan cuenta de su potencial para participar activamente en el profundo debate sobre el rumbo que ha de tomar la Unión Europea en el futuro. Este año la UE lanzará una importante Conferencia sobre el Futuro de Europa, un proceso un debate que pretende ser abierto e inclusivo, en el que todos los ciudadanos podremos proponer ideas para diseñar la UE del mañana. Desgraciadamente, la pandemia nos ha obligado a retrasar el comienzo de este diálogo, que debería haber comenzado hace ya unos meses, pero estoy convencida de que el arranque en las próximas semanas de este periodo de reflexión será un nuevo hito en la democracia participativa.

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El futuro (sostenible) de la Unión Europea está en las manos de todos, pero sobre todo en las de las generaciones más jóvenes: «La Europa del futuro será la que imaginen y construyan los niños de hoy», nos recuerda María Andrés Marín. Son ellos los que, con sus votos futuros y sus acciones actuales, ya han empezado a redibujar el mapa de la solidaridad y el cuidado del medioambiente en el continente.

Texto: Raquel Nogueira

Imagen principal: Elena Buenavista

*Si eres profe Naturaliza y quieres conocer más sobre este tema y cómo trabajarlo con tu alumnado: en la sesión 3 del proyecto de 6º de primaria ‘Cambio global, economía local’ te proponemos abordar desde el área de Ciencias Sociales los diferentes hitos y eventos que han marcado la evolución de la Unión Europea, así como los retos y logros alcanzados desde su constitución, reflexionando sobre cuáles de ellos pueden afectar directamente al cambio global. En la sesión 4, comparamos el estilo y nivel de vida de diferentes países de la Unión Europea y analizamos sus huellas ecológicas. Concluimos con una reflexión sobre el papel de la Unión Europea en la búsqueda de soluciones frente al cambio global.